He intentado crear un estilo propio dentro del piano flamenco. Hay algunos que han intentado asemejar el piano a la guitarra, pero creo que el piano flamenco tiene que tener su propia personalidad, ser independiente como instrumento, dentro del flamenco.
He estado luchando con eso y creo que he conseguido que el piano sea un instrumento totalmente diferenciado, sin perder su esencia pero sin parecerse a ningún otro. Aunque es flamenco, algunas obras de las que he hecho en algunos discos y espectáculos, tiene su propia identidad. Yo creo que eso es muy importante. Ha evolucionado también mucho en lo que se refiere a la fusión, con otras culturas y otras músicas, algo que en la guitarra y en el cante viene haciéndose desde el siglo XIX, como por ejemplo en los cantes de ida y vuelta, que actualmente podemos asemejarlos a otro tipo de fusión, como por ejemplo la que actualmente se hace entre el flamenco y el jazz.
Paco de Lucia, indiscutiblemente, a sido el que ha roto la lanza en este sentido y al que han seguido muchos otros músicos entre los que me incluyo. Yo he estado trabajando en ese camino, en el de la fusión del flamenco con el jazz. En mi último disco, “Gitana”, está muy presente y he trabajado con músicos que, además de acostumbrados a tocar flamenco, están acostumbrados a tocar jazz, como Jorge Pardo, Carles Benavent o Tino di Geraldo, que han trabajado con Paco y que están acostumbrados a este tipo de fusión. Han abierto muchos caminos, sobre todo armónicamente en el mundo del flamenco y yo creo que eso es muy importante.
A fin de cuentas, una malagueña cantada con un piano suena tan solemne como una pieza clásica o como aquello que se contaba de Enrique El Mellizo, que iba a la iglesia a escuchar cantos y gregorianos.
-”El flamenco siempre ha sido una referencia para los músicos españoles clásicos. Manuel de Falla, Albéniz, Turina, Granados, todos han bebido un poco del flamenco y lo han tratado de llevar a conciertos. En mi caso, tengo obras que son muy flamencas y que se puede decir que son flamenco-flamenco y otras que son más clásicas, más vinculadas al mundo de esos compositores. El flamenco puede ser solemne, pero también puede ser fiestero. El flamenco es tan rico que me da la posibilidad de expresar lo que siento a través de el y gracias a la música clásica me he enriquecido como músico, permitiéndome desarrollar la técnica”.
Influencias
Los autores clásicos españoles Granados, Albeniz, Turina y en especial Manuel de Falla así como los autores de clásicos rusos Rashmaninov, Tchaikovsky, Prokofieff han sido para mí muy importantes en mi carrera y creo que todos ellos han tenido cierto reflejo también en mi música. Una música fuerte y con mucho carácter. Luego, el jazz por supuesto, me encanta. Chick Corea o Michel Camilo han sido para mí un referente. Todos los países que he visitado me han influido y su música también.
